Bebe con orgullo

Hoy desde Devinos con Alicia queremos hacer honor a todo un movimiento, una forma de vida, una orientación, una dirección vital, una manera de sentir y de amar aprovechando que se celebra el día Internacional del Orgullo Gay. En esta fecha todos (o casi) salimos a la calle para reivindicar una opción de liberarse. Como no podía ser de otra manera, al mundo del vino también ha llegado esta dinámica y nosotros nos unimos momentáneamente a ella rememorando con una sonrisa en los labios a la par que una comida con mis grandísimos amigos Marco Antonio A. y David S.

No os vamos a engañar, algunos han criticado (no sin excederse en sus comentarios intransigentes y un tanto insultantes) esta iniciativa de «convertir un vino en gay». Para mí, no tiene nada que ver con conversiones de ningún tipo, simplemente es un estudio de marketing, otra forma enfocada de ver las cosas y un producto dirigido a un público diana de forma muy acertada (ya que la bodega de la que hablamos hoy impactó seria y positivamente durante FiturGay, además de en otros importantes eventos). El hecho de ser vista una botella de forma multicolor no implica que al colectivo gay se les prohíba disfrutar de un Petrus, Pingus o cualquier otro grande… o de un buen vermú (echando mano a mi cajón de sastre memorístico). Estos vinos no tienen nada que ver con prohibir, tiene que ver con la libertad de expresarse y… ¿a quién le importa si ser «un vino gay» se convierte en un nuevo valor añadido?

Orgullo Wine

Como comentábamos en la introducción, y alejándonos de la crítica destructiva pues hoy es un día para celebraciones, la idea de dedicar un artículo a los vinos dirigidos a este mercado surge con la pregunta: ¿hay vinos gays? podrías escribir un artículo… y una comida en Gourmet Experience a base de una tabla de quesos, jamón ibérico, vermú Petroni, gintonics, cócteles de maracuyá,… con la más que agradable compañía de David S. y Marco Antonio A. (hechos un yin y yang mezcla de sensatez y chispa a los que tengo especial cariño) a la que luego se unieron dos amigos y hermanos canarios.

Así que recabando información para satisfacer esta cuestión, esta duda más que razonable encontré Orgullo Wines (basada en la recomendación de un conocido). Vemos en la imagen superior que de tono provocador no andan precisamente cortos (aunque no entran en la promiscuidad visual), pero esa sinceridad sin tapujos y refinada es lo que les está llevando al triunfo. Para los creadores de esta «polémica» bodega su proyecto de Orgullo Wines se ha tratado desde el momento uno de crear una diferencia, una señal distintiva, una definición que les caracterice… y, por resultados y presencia del propio vino, lo han conseguido. No cabe duda, su iconografía lo distingue del resto y lleva al consumidor a percibir y experimentar un juego de sensaciones. Sin embargo, esto no es todo lo que les diferencian pues a demás de ser un cañonazo de color también es un producto con la suficiente calidad para recomendarlo en este espacio.

Orgullo Wines no se ha dejado de mover a nivel de comunicación y acciones, ya que patrocinaron la película «De chica en chica» que se estrenará el 25 de Septiembre de este mismo año… además de también estar presente en algunos de los eventos del mercado LGTB. No nos engañemos, moverse… se mueven ¡y mucho! De hecho, algo que me ha encantado de ellos es que donan a ONG UK y Holanda partidas destinadas a derechos humanos para el colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales.

Pero volviendo a sus parámetros de calidad y elaboración, esta bodega ha decidido desde sus inicios orientarse al actual paradigmático mercado con un producto no ajeno a transmitir los valores que lo distinguen y, en esto, soy firme defensora (respetando la opinión de cada cual). Saben que el actual consumidor es exigente, y mucho, así que tienen el objetivo compartido de dar frescura y provocar a un sector algo añejo… (cosa que aplaudo, ya que todo lo que incite a la introspección y autocrítica es motivo de apoyo). Para todo esto han sacado al mercado tres tipos de vino: blanco, rosado y tinto con pequeña crianza… aunque están planteándose crear nuevos vinos espumosos y tinto con más sabiduría. Sin límites ni fronteras, pues una de sus ideas insignia es que sus vinos no tengan la personalidad de un origen concreto… simplemente buscar su identidad particular embotellada… algo que nos lleva a hablar la IGP Vinos de la Tierra de Castilla, ¿cabe preguntarse por qué esta denominación cuando es uno de los mayores cajones de sastre? el origen roza lo lógico más que lo característico teniendo en cuenta su idea de identidad propia en lugar de este origen concreto.

 ¡Entremos en harina que ya toca! El primero de los vinos que vamos a catar es un vinito blanco de Sauvignon Blanc y Chardonnay con paso por barrica nueva. Ya se ve, la palidez es su insignia visual… en cuanto a su paleta aromática no se discriminan ninguno de los dos varietales que lo componen ya que es una mezcla de piña y ciertos carácteres tropicales con una amalgama de flores y hierba en su inicio en copa. Muy fácil de tomar, con acidez integrada en el vino que para ser un blanco con un pequeño paso por madera no deja indiferente,… sin duda alguna ¡interesante!

Seguimos la cata con el rosado de la familia. En este caso de la variedad Syrah… bajo mi subjetiva opinión (no sin remarcada profesionalidad y experiencia) tiene muchísima caña, y de la familia Orgullo Wine es el que sube al top one del podium. Un vino bastante subido en tono con una nariz curiosamente compleja y sutil en la que, como no podría ser de otra manera, se diferencia muchísima fruta roja y olores a piruleta mezclada con esos aromas distintivos de la Syrah como el bajomonte, cassis y ciertas especias sobre todo apreciables en boca. De paladar largo y fruta que mantiene en sintonía las golosinas latentes en boca con una marcada acidez y ligera nota amarga al final,… ¡es un pelotazo para al que le gusten los rosados!

Llegamos al último vino, por supuesto tinto. ¡Ohhhhh! Se trata de un ensamblaje de Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Tempranillo y Syrah… pinta tiene de tener la misma caña o más que el anterior, un vino tinto con tonterías las justas. ¡Veamos que nos sugiere! En copa es granate y nada pomposo… nariz curiosa con un desprendimiento alcohólico algo elevado aunque no preocupante, compleja a mermeladas de frutos rojos y negros, bajomonte, especias, tostados bastante marcados y ligeros toques minerales y de violetas y rosas.  En boca continua siendo alcohólico, algo que se integra con la acidez presente y por lo que no llega a ser desagradable del todo… nos deja una sensación en boca de cierto verdor (mix de raspón con unos más que sugerentes taninos) que puede llegar a ser incluso interesante junto con los aromas percibidos en nariz… lo curioso es que es bastante largo y se te queda en la garganta con un más que romántico retronasal de caramelo.

Pues bien, hasta aquí nuestras divagaciones de hoy. Espero sinceramente que no os detenga la etiqueta para catar estos vinos ya que son referencias asequibles y fáciles de tomar, vinos sin complicación ninguna a la par que interesantes (sobre todo el rosado y el tinto… ¡aunque el blanco tampoco te lo pierdas!). Mientras, aquí seguimos disfrutando de una copa bien fresquita de nuestro [elegido] rosado con el completo gustazo de volver a ver Ed Wood… película black & white teñida de rosa frambuesa… lila, azul, verde, amarillo, naranja y rojo carmesí.

Por supuesto, este artículo está especialmente dedicado a quienes me dieron la idea: David S. y Marco Antonio A. (a quien más pronto que tarde visitaré en Canarias) y a todos los que hoy celebran su día.

Nos vemos el miércoles con el estreno de ¿Me llamas vino? para adentrarnos en el más que fascinante mundo del sake y conocer a Sasayama Mayuko de Tokio Ya. ¡Os esperamos!

Feliz día Internacional del Orgullo Gay.

Si te ha gustado este artículo recuerda que, más abajo, puedes disfrutar de otros que seguramente encuentres igual de interesantes… o eso espero, porque la verdad es que los hemos hecho con mucho cariño. Así que si quieres apoyar a Devinos con Alicia, déjanos tu comentario en el cajetín del final de página 😉

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